Plantea vigilar programas de siembra y distribución de árboles, plantas tradicionales y medicinales, en zonas marginadas y zonas indígenas
Con la finalidad de garantizar la protección de las plantas nativas de Baja California, así como formular, evaluar, aplicar y vigilar programas de siembra, distribución de árboles, plantas tradicionales y plantas medicinales, en zonas marginadas y zonas indígenas, la diputada Evelyn Sánchez Sánchez, presentó una iniciativa para reformar la Ley de Protección al Ambiente del Estado.
En el Estado existe una diversidad de plantas medicinales utilizadas, desde hace siglos, por los pueblos originarios en Baja California, tanto en la alimentación como en rituales, sin embargo, estas plantas han empezado poco a poco a ser sobrexplotadas y vendidas por sus propiedades curativas y otras tantas por modismos, a otras partes del mundo como China, Estados Unidos y América Latina, incluso en plataformas digitales.
Estas plantas se pueden encontrar en venta en distintas plataformas como Alibaba en China, Amazon en Estados Unidos y Mercado Libre en América Latina, donde al buscar la palabra Salvia Blanca o White Sage, arrojan en los resultados desde manojos hasta aceites esenciales, teniendo un costo promedio los ramos de 80 pesos, pudiendo adquirirse entre los 20 y 30 pesos, al comprarlo al mayoreo.
La diputada morenista, expuso que habitantes de comunidades indígenas en el Estado, reportaron haber visto camiones cargados de Salvia Apiana, también conocida también conocida como Salvia Blanca y Yuca Schidgera, mismas que han sido retiradas de manera furtiva por grupos armados, aun cuando se encuentran en proceso de crecimiento y reproducción. Indican que estos robos son cometidos a lo largo del año, lo que ha obligado a los pobladores de las comunidades originarias a conformar grupos de autodefensa para la protección de sus plantas medicinales.
Por lo anteriormente expuesto, es necesario buscar la preservación y siembra de plantíos nativos, con lo que se brindarían múltiples servicios a la sociedad y al medio ambiente, ya que las plantas nativas están adaptadas al clima local por lo que no tienen que ser podadas, fertilizadas, fumigadas ni regadas con mucha frecuencia, además de proveer de refugio y alimento a la fauna.