La SADER reportó que este producto es el más avanzado en la zona costa
Dentro del ciclo agrícola 2020-2021, la fresa de San Quintín es el cultivo de toda la zona costa de Baja California que presenta un mayor avance, el cual hasta el momento registra una superficie sembrada de mil 849 hectáreas.
De acuerdo con lo reportado por el encargado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en Baja California, Juan Manuel Martínez Núñez, a nivel general los cultivos de la zona registran un avance del 54 por ciento con el establecimiento de 2,537 hectáreas.
Martínez Núñez informó que durante este ciclo tienen programada la siembra de 4 mil 677 hectáreas con diversos cultivos, entre los que sobresalen la fresa, calabacita, chícharo, col de Bruselas, tomate y cultivos varios, principalmente hortalizas.
Comentó que el mayor avance de siembras lo presenta el cultivo de la fresa, con el establecimiento de 1,849 hectáreas, lo que representa un avance del 63 por ciento con relación a las 2 mil 922 hectáreas, programadas al inicio del ciclo agrícola.
Señaló que la mayoría de las siembras de fresa, se están presentando en los campos agrícolas de San Quintín, Vicente Guerrero y San Vicente. Es posible que el avance de siembras sea mayor, pero por la reducción de personal activo por causa de la pandemia, es lo que se tiene detectado al momento, precisó el funcionario.
La fresa, por superficie y el valor de la producción que genera, es el principal cultivo del ciclo agrícola otoño-invierno, en la modalidad de riego, aseguró el funcionario.
A dicho cultivo le sigue la col de Bruselas con la siembra de 121 hectáreas. Dicha superficie sembrada, indica un avance del 42% con respecto de las 291 hectáreas planeadas por los agricultores de dicho Distrito.
El resto de los cultivos, van desarrollándose de la siguiente manera: calabacita 64 hectáreas; chícharo 17 hectáreas; tomate 10 hectáreas y cultivos varios, principalmente hortalizas, con 476 hectáreas.
El representante de la SADER recomienda a los productores que están en el proceso de siembra, utilicen semillas de categoría certificadas de empresas de reconocido prestigio y consideren la disponibilidad de agua para sus cultivos, con la finalidad de que alcancen una mayor productividad al final de la cosecha.
