Los primeros reportes atribuyen que los cuerpos corresponden a los desaparecidos desde el 01 de junio
San Quintín.- Mientras que ciudadanos de Bahía de los Ángeles han confirmado la identidad de varios de los cuerpos localizados en una fosa clandestina en el extremo sur de San Quintín, la Fiscalía General del Estado confirmó que todos presentaban huellas de violencia.
Así lo informó este martes la Fiscal General del Estado, María Elena Andrade Ramírez, en atención a medios en el puerto de Ensenada, tras unos días de divulgarse el hallazgo en una zona alejada en los límites entre Baja California y Baja California Sur.
La Fiscal General indicó que los primeros reportes indicaban la desaparición de varios hombres, por lo que acudieron agentes encabezados por el Fiscal de Homicidios y Desaparición. Asimismo, confirmó que los cuerpos se encontraban en una zona cercana a los límites entre ambos estados.
Señaló que los cuerpos se encontraban en estado de putrefacción. Sin embargo, afirmó que hay señas particulares que podrían atribuirse a los desaparecidos. Mayores detalles serían obtenidos al concluir las pruebas de genética, indicó Andrade Ramírez.
En el mismo sentido, la Fiscal aclaró que los cuerpos presentan huellas de violencia, aparentemente tras recibir impactos de arma de fuego. Bajo este panorama, agregó que solicitaron un estudio de balística para determinar si el ataque está relacionado con otros incidentes.
A pregunta directa, la titular de la Fiscalía General del Estado sostuvo que se trata de un enfrentamiento entre grupos criminales, por lo que colaborarían con autoridades de Baja California Sur para la investigación y estrategia correspondiente.
Desde el 01 de junio, residentes de Bahía de los Ángeles denunciaron la desaparición de un grupo de jóvenes. Desde entonces fueron identificados como Gerardo, Miguel Heriberto, Edgar Alberto, Josué, Omar Antonio, Anthon y Jesús Manuel, Daniel Alberto. La mayoría eran jóvenes, incluidos dos menores de edad, y un hombre de 40 años.
Cinco días después habrían sido localizados en una fosa clandestina en las inmediaciones de la Misión San Borja.
