Celebró el CICESE el Día Mundial de la Propiedad Intelectual
Producto de un rezago histórico, la innovación y la propiedad intelectual (PI) siguen siendo áreas en las que, a nivel nacional e internacional, predomina el género masculino, por lo que ya hay esfuerzos de redes científicas para avanzar hacia la equidad en este campo, coincidieron destacadas investigadoras del CICESE durante una conferencia conmemorativa al Día Mundial de la Propiedad Intelectual.
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), a nivel internacional, solamente el 33 por ciento de las solicitudes de registro de PI tiene la participación de mujeres.
Este panorama fue presentado por la doctora Patricia Álvarez, especialista en PI, durante la conferencia “Las mujeres y la propiedad intelectual: una mirada en el contexto mexicano”, impartida en el CICESE. Esta actividad formó parte del programa conmemorativo del Día Mundial de la Propiedad Intelectual organizado por la Dirección de Impulso a la Innovación y el Desarrollo (DIID) del CICESE.
Álvarez expuso que a nivel nacional los registros de PI también son predominantemente solicitados y obtenidos por hombres, según datos del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
Un comparativo con datos del IMPI, del periodo 2020-2022, muestra que el 78 por ciento de los registros de patente fueron obtenidos por hombres, el 18 por ciento por equipos mixtos y el cuatro por ciento por mujeres.
En cuanto al registro de modelos de utilidad, el 83 por ciento fue obtenido por hombres, el 12 por ciento por equipos mixtos y el cinco por ciento por mujeres. En diseños industriales, el 63 por ciento de los registros fue obtenido por hombres, el 13 por ciento por equipos mixtos y el 24 por ciento por mujeres.
“El periodo es corto para sacar muchas conclusiones, pero lo que sí noto es que cuando los equipos son mixtos tienen más éxito que si las mujeres lo hacen solas. Esto es interesante porque no se trata de una competencia, se trata de cómo hacer equipos en los que todos aporten y sean más valiosos”, opinó la especialista.
Mencionó que para impulsar la participación de las mujeres, en 2021 fue creada en México la Red de Mujeres Innovadoras y Propiedad Industrial, que cuenta con mil 700 integrantes y se dedica a ofrecer mentorías a mujeres para la obtención de registros de propiedad intelectual, además de inspirar a más mujeres para el desarrollo de emprendimientos.
Para exponer cómo ha sido su experiencia en el proceso de solicitud y obtención de patentes, cuatro investigadoras del CICESE participaron en el panel “Las investigadoras y la propiedad intelectual: experiencias en el proceso de PI”, moderado por la doctora Noemí Sánchez Campos.
La doctora Pilar Sánchez Saavedra compartió que la PI es una forma de contribuir a la sociedad, pues si lo que se descubre se protege, se convierte en una vía para desarrollar tecnología y ofrecer a la sociedad un resultado de la investigación científica.
Por su parte, la doctora Carmen Paniagua Chávez opinó que la PI tiene que ver con impulsar la competitividad del país: “No hay manera de que nuestro país pueda salir adelante si no empezamos estas prácticas de protección de lo que tenemos, de innovación, de creatividad y estar dejando todo un eslabón de experiencias”.
Respecto a su experiencia, la doctora Patricia Juárez Camacho consideró que, cuando se trabaja en ciencia básica, lograr aplicar la ciencia que se desarrolla se vislumbra “como un sueño” y añadió que se siente privilegiada por contar en su propio departamento con especialistas que la asesoran y acompañan en el proceso de creación de PI.
Para la doctora Carolina Álvarez Delgado el cambio de paradigma se dio cuando se incorporó al Departamento de Innovación Biomédica del CICESE: “Yo ya trabajaba con biología celular, biología molecular, pero realmente ahí es cuando se me abrieron los ojos de que lo que yo estaba haciendo en ciencia básica podía tener una aplicación tangible que beneficiara al área de la salud”.
Las investigadoras coincidieron en que no han detectado obstáculos particulares de su género en el proceso de solicitud de patente, pero reconocieron que eso es resultado del trabajo de otras personas que abrieron camino antes que ellas.
Para la doctora Carmen Paniagua las dificultades radican en los roles de género asignados socialmente a las mujeres pues, además de hacer ciencia, son responsables del cuidado de la familia y el hogar. Agregó que las mujeres no reciben la misma educación en temas de innovación en comparación con los hombres, algo que corroboró cuando presentó su solicitud de patente.
Durante el panel, las investigadoras también hablaron sobre el proceso que inicia en el laboratorio hasta llegar a la solicitud de patente y expusieron algunas propuestas para fortalecer la cultura de la PI al interior del CICESE.
