La finalidad es reducir la contaminación ambiental y tener una mejor calidad de vida en el Estado
Al indicar que estudios recientes demuestran que las principales causas de contaminación en una ciudad o entidad urbanizada, son los automóviles y autobuses, además de que participan en la contaminación sonora, el diputado Román Cota Muñoz, propuso en el Congreso del Estado incentivar el uso de unidades de transporte público eléctrico.
Roman Cota agregó que la mayoría de los bajacalifornianos utilizan el trasporte urbano como su principal medio de transporte. Poco más de un millón de usuarios lo usan de manera semanal, aunque consideran que se requieren nuevas unidades para satisfacer el servicio.
Esto fue señalado por el legislador del Partido Revolucionario Institucional, al emitir ante el Pleno, un posicionamiento referente a incentivar el uso de unidades de transporte público eléctrico, con la finalidad de reducir la contaminación ambiental, y con ello tener una mejor calidad de vida en el Estado.
Señaló que en nuestro País, algunos estados han empezado a introducir autobuses eléctricos, citando como ejemplo a la Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara y el Estado de Sinaloa, como los principales ejemplos en apoyar y fomentar este tipo de movilidad.
“De lo anterior, -dijo- se observa la importancia de incentivar la compra y uso del transporte público eléctrico por parte de la autoridad estatal y las municipales, y que los concesionarios renueven sus unidades, y, que estas sean eléctricas”.
“Con ello nos beneficiamos todos, usuarios con el disfrute de unidades de calidad; los concesionarios con el mantenimiento a menor costo, y la sociedad, con un medio ambiente sano”, resaltó.
Expuso que, ante el interés de los transportistas nacionales por operar a tecnologías más amigables con el ambiente, las armadoras de vehículos pesados con presencia en México, han señalado que este 2022 será un año clave para promover los primeros acercamientos con los camiones eléctricos.
Finalmente puntualizó que, la expectativa es que la electrificación del transporte urbano se acelere en la segunda mitad de la década actual, gracias a la caída de los costos de las baterías y la fabricación a mayor escala.